** aQueL díA

Recuerdo aquel día como si estuviera allí ahora, puedo sentirte, tu respiración,
tu aroma, tu piel, tu boca, tu cuerpo, ... ... puedo sentirlo todo con sólo cerrar los ojos...

Hacía sol y no mucho frío para ser pleno invierno.
Amanecimos abrazados como cada noche que compartíamos y...
nadie,
nunca,

había sabido despertarme como tú...

Entre miradas, sonrisas y besos planeamos el resto del día... domingo,
todo era buena idea si éramos cómplices unas horas más.

Todo fue perfecto, tú hiciste que lo fuera. Me mimaste con tu silencio, con tus miradas furtivas, con la música... cada detalle, cuidaste cada detalle. Tus pensamientos llegaron hasta mí sin que tuvieras que traducirlos a palabras... supiste lo que necesitaba en cada momento.

Al final del día todo explotó, explotó en el instante en que decidiste saborear mi piel una vez más antes de irme, en que te volviste loco, en que me hiciste sentir más aún, en que me hiciste tuya de nuevo...

Adoro las sorpresas... ahora sólo quiero abrir los ojos y "seguir soñando".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Un día fucsia... que se repita mucho :-)

Anónimo dijo...

Los días perfectos existen, y no sólo en los sueños.

Ligeia dijo...

Sueña con los ojos abiertos y con los ojos cerrados y sonríe y disfruta de los domingos, de los jueves, de los sabádos y de las fiestas y sus vísperas.

Un saludo